Nada está tan lejos!

"En esta casa nació Orlando Martínez Howley, periodista asesinado..."
Así empieza una pequeña inscripción
frente a una común casa en mi pueblecito,
Las Matas de Farfán, que veía desde pequeño,
la cual nunca entendí ni nadie nunca

se detuvo a explicarme"

Era el 23 de Septiembre de 1970, el Dr. Tucídides Martínez preparaba sus herramientas para trabajar. El próximo día serían las fiestas de Las Mercedes. No importaba. Era un trabajo importante.

Algunas de sus herramientas serían : Frialdad, Servilismo, entre otras. Tenía otra pendencia : Su hermano cumplía años este día. Debería ahora mismo dejar de pensar en trabajo por un rato. Había que felicitarle.

Para eso mostraría su mejor rostro? Sería genuino y sincero? Amaría? Sería capaz su mente de fluctuar entre la crueldad y el amor?

Algunos no creen en lo genuina que puede llegar a ser la realidad virtual que crean y en que viven ciertos personajes.

Así como el tirano suplantaba al mismísimo Dios en el escudo. Y luego él mismo lo llegaría a creer; Así como la nietecita crea el Trujillo amoroso sin límites, incapaz de tocar una flor. Y luego se lo cree; Así como, luego de visitar el reino español no queda más remedio que coronar una niña como "Angelita Primera", y se lo cree, o un niño como General...

Así como Balaguer, emulando la tiranía, desacata abiertamente el requerimiento de un Juez competente y no asiste a declarar en un juicio histórico. Haciéndose todopoderoso, y creyéndoselo.

Así como taaaaantas más irrealidades pasan a su antónimo... y se las creen.


Ya eran las 4:00AM

El trabajo le llamaba. Visitarían a un joven. El Dr. Tucídides Martínez asistiría en calidad de Ayudante Fiscal. Los demás eran policías. Llegarían. Tumbarían la puerta. La escena no podía ser más conmovedora : Un jovencito, su esposa embarazada y su pequeño. Se acercaba la hora cumbre. En el momento en que la presencia de la justicia era requerida para filmar un asesinato, "una llamada" fue más importante.

Amín Abel Hasbún caería mortalmente herido de un disparo en la nuca frente a su esposa e hijo. El Ayudante Fiscal que lo defendería de tales situaciones, o por lo menos las certificaría, estaba "atendiendo una llamada telefónica". Los pies del Ayudante Fiscal se santificarían al regresar y hundirse en un charco de sangre inmortal.

Estaba lejos. Abel y su esposa gritaron, pero él estuvo lejos.



Pero nada está tan lejos...
Él no estaba tan lejos.

5 años después, ya no podría celebrar el cumpleaños de su hermano.

El 17 de Marzo de 1975 en horas de la noche, cinco años más tarde, otra patrulla, con idéntica sed, se saciaría con la sangre de Orlando Martínez. Esta vez no habría Ayudante Fiscal. De todas formas, quizás a éste también "le llamarían por teléfono". Lo más seguro también sería una llamada importante en el momento cumbre.

Desde el 18 de Marzo de 1975, el Dr. Tucídides Martínez y todo el país llorarían a su hermano. Lloraría con la misma rabia e impotencia con las que lloraron a Hasbún. Dolor del bueno. Amargura.

Entonces volvemos a las cuestiones :

Para eso mostraría su mejor rostro? Sería genuino y sincero? Amaría? Sería capaz su mente de fluctuar entre la crueldad y el amor?



Eso tampoco estaba tan lejos; es más :

Nada está tan lejos!