Dos, de tres!

Anoche les escribí un artículo hermoso aunque preocupante acerca de cómo en el futuro será más fácil para los dominicanos modificar la Constitución que usar el derecho al Referéndum, dependiendo mucho de cómo afecte o no el tema en conflicto a los intereses particulares de los eventuales congresistas.

Esto se debe al vicio fatal de someterlo a la aprobación de dos terceras partes del poder legislativo, idéntica proporción exigida para una reforma de la misma carta magna en el proyecto enviado por el ejecutivo.

Me preguntaba porqué los pueblos hoy no aprenden del caso Honduras y consagran una vía directa de consulta al Soberano para CUALQUIER TEMA que éste pida ser consultado según regule la Ley. De ahí el título: Soberano.

CONTINÚA EN LA PARTE II